OJO GUAREÑA, PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD


1. Introducción y justificación de la propuesta

El Karst de Ojo Guareña se localiza al Norte de la provincia de Burgos, en la Comarca de Las Merindades. Se trata de un espectacular conjunto de cavidades que mayoritariamente se localizan en la Merindad de Sotoscueva, que fueron comenzadas a explorar en 1956 por el Grupo Espeleológico Edelweiss de la Excma. Diputación de Burgos.

En el conjunto del karst son cerca de 400 las cavidades estudiadas y publicadas. Buena parte de ellas están relacionadas, o lo estuvieron en tiempos pasados, por su génesis e hidrología, formando parte del denominado Complejo Kárstico de Ojo Guareña. El enlace de once de estas cavidades se conoce como red principal de Ojo Guareña y consta de más de 100 km de galerías topografiadas, distribuidas en seis niveles superpuestos, lo que la configuran como la mayor cavidad conocida en España y la úndecima entre las mayores cavidades del mundo. Otras cavidades del Complejo, que no conectan con la red principal, poseen igualmente desarrollos importantes, totalizando, sólo entre las mayores, otra larga decena de kilómetros topografiados.
En su interior albergan multitud de yacimientos arqueológicos que abarcan desde el Paleolítico Medio (presencia de restos atribuidos al Homo neandertalensis), Paleolítico Superior (pinturas, grabados, improntas de pies humanos), Neolítico, Calcolítico y Edad del Bronce (pinturas, grabados, zonas sepulcrales y de hábitat, silos), Edad del Hierro (individuo perdido en la cueva junto con su ajuar personal), Época Romana (cerámicas), Edad Media (zonas de hábitat y refugio en las entradas de las cuevas, Ermita de San Tirso y de San Bernabé, zonas sepulcrales), hasta la época actual (ampliaciones de la ermita, pinturas de su bóveda, Sala del Ayuntamiento).
La importancia de sus yacimientos arqueológicos motivaron a que la Excma. Diputación Provincial de Burgos, por iniciativa del Grupo Espeleológico Edelweiss, solicitara en 1968 su declaración como Monumento Histórico Artístico, hecho que se logró en 1970. Desde 1985 la Ley de Patrimonio denomina a los antiguos M.H.A. como Bien de Interés Cultural.
En 1983 el Instituto Geológico y Minero de España incluyó a Ojo Guareña entre los Puntos de Interés Geológico de la Cordillera Cantábrica, en base a sus aspectos hidrogeológico y científico, con carácter internacional.
También es notoria la variedad e importancia de sus especies biológicas, de las que se han descrito casi un centenar, algunas de ellas exclusivas de Ojo Guareña o citadas aquí por primera vez. Otras especies nuevas para la ciencia están en este momento esperando su publicación por los especialistas.
La importancia de sus diferentes especies cavernícolas, así como la variedad de su fauna y flora exterior y la singularidad y belleza de su paisaje facilitaron su declaración, en 1996, por la Junta de Castilla y León, como Monumento Natural.
También es significativo el interés de la ermita de San Tirso y San Bernabé, tanto por sus valores patrimoniales y etnográficos, como por ser un centro de culto en torno al que anualmente se organiza una romería cuya tradición rebasa los límites provinciales. En la actualidad, la Junta de Castilla y León ha promovido su puesta en valor con la habilitación turística de un itinerario subterráneo que permite recorrer unos 300 metros por la cavidad, así como varios itinerarios exteriores, estando prevista en el futuro la habilitación de otros itinerarios adicionales, así como de un Centro de Interpretación.
Por todos los valores expuestos, la Excma. Diputación Provincial de Burgos, a iniciativa del Grupo Espeleológico Edelweiss, decide solicitar formalmente a la Junta de Castilla y León que inicie los trámites que permitan la declaración de Ojo Guareña como Patrimonio de la Humanidad.

2. Geología e Hidrogeología

La principal característica geomorfológica de toda la región es su relieve de cuestas, modélico y sumamente didáctico, cuya vertiente septentrional es muy abrupta y la meridional bastante suave. El frente de una de estas cuestas, el escarpe, resalta nítidamente en la geografía regional, durante decenas de kilómetros, como una sucesión de cejos lobulados. Se trata de un paquete de calizas y calizas dolomíticas del Coniaciense medio-superior, en el que se desarrolla el Complejo Kárstico de Ojo Guareña.

En el reverso de esta cuesta se desarrolla el Sinclinal de La Mesa, una estructura geológica, de gran claridad y belleza si la contemplamos desde el Oeste, que favorece la existencia de un gran acuífero subterráneo que se instala en todas las fisuras y galerías existentes en las calizas.
Este acuífero kárstico se alimenta de todas las precipitaciones caídas sobre el macizo calcáreo, que rápidamente se infiltran hacia sus diferentes galerías aunque, si las precipitaciones son muy intensas, por el fondo de la depresión sinclinal llega a discurrir el arroyo de Villamartín, que finalmente se sume por la Sima Dolencias originando una espectacular cascada de 54 metros de altura.
No obstante, la mayor parte de las aguas que alimentan el acuífero subterráneo provienen de la vertiente sur de los Montes del Somo, una cordillera que albergó importantes fenómenos del glaciarismo cuaternario, dado que al descender hasta el Valle de Sotoscueva se topan con una gran depresión cerrada por las calizas coniacienses.
El río Trema y el arroyo de la Hoz lograron labrar en las calizas unos bellos cañones, aunque finalmente siempre acaban por infiltrarse por los diferentes sumideros que jalonan sus respectivos cauces.
El río Guareña no logró abrir un cañón, originando un valle ciego, el Circo de San Bernabé, en cuyo fondo comenzó a sumirse hace centenares de miles de años. La pérdida actual se conoce como Ojo del Guareña. A más de 60 metros por encima se localizan, entre otras, las bocas de entrada de la Cueva de San Bernabé que realizaron ese mismo papel en épocas pasadas.
La circulación del agua por el interior del macizo motiva que las fisuras y conductos se agranden progresivamente por disolución. Tras varios kilómetros de recorrido subterráneo, los diferentes ríos de Ojo Guareña ven de nuevo la luz por una serie de resurgencias asociadas a una falla que delimita meridionalmente el acuífero. Las resurgencias principales son La Torcona y El Torcón.


3. Geomorfología. El exokarst


Ya nos hemos referido a algunas de las principales formas exokársticas de Ojo Guareña, como las dos grandes depresiones cerradas por las que discurren el río Guareña y el arroyo de Villamartín hasta que finalmente se sumen por el Ojo del Guareña y por la Sima Dolencias respectivamente.
También son reseñables los cañones del arroyo de la Hoz y del río Trema, que cortan los niveles karstificables del Complejo, viéndose jalonados por un sinfín de sumideros, destacando la espectacularidad de Las Diaclasas, en el caso del Trema.
En el extremo W del karst se localiza El Ventanón, impresionante arco natural de 30 metros de anchura y casi 20 de altura, vestigio de una antiquísima forma de conducción, hoy prácticamente hundida en su totalidad. En sus proximidades se localiza el campo de lapiaz desnudo más desarrollado de Ojo Guareña, con acanaladuras, marmitas, lapiaz redondeado, pero sobre todo un lapiaz de diaclasas y una topografía ruiniforme con formas residuales de más de 4 metros de altura.
Por todo el reverso de la cuesta predominan las formas exokársticas, localizándose innumerables diaclasas, dolinas, simas y cuevas por las que el agua se infiltra con gran rápidez. Aparte de las bocas de entrada ya citadas, la dolina de Cueva Palomera y la dolina y simas de Covaneria son quizás las dos de mayor belleza.

4. Geomorfología. El endokarst


El hecho de que la pérdida del río Guareña se haya mantenido en la misma zona, a pesar del encajamiento de la red hidrográfica, ha facilitado la disolución de un enorme enrejado tridimensional, en el que son claramente definibles seis niveles distintos, de los que los tres superiores son actualmente inactivos hidrológicamente, los dos siguientes se ven sometidos a circulación estacional y el inferior es por el que discurre permanentemente el río Guareña. Se conoce como Dédalo Oeste y agrupa, bajo un kilómetro cuadrado de superficie, más de 30 kilómetros de conductos topografiados.
La intrincada red de conductos evoluciona en torno a dos axiales que se orientan, paralelas al Sinclinal de La Mesa, en sus dos flancos. En el flanco norte se localiza la axial principal, que engloba más de 90 kilómetros de conductos. A la red de conductos originada por el Sumidero del Guareña se unen, por el Oeste, los procedentes de las filtraciones del páramo de Villamartín, canalizados actualmente por el Río de las Marmitas, al que se puede acceder por la Sima Rizuelos.
Tras recorrer varios kilómetros hacia el Este, la red de conductos pronto se vió seccionada por el Cañón del Trema, por lo que en su margen oriental las galerías conocidas disminuyen sensiblemente de sección hasta hacerse impenetrables. La mayor parte del año el cauce del Trema está seco pues el río discurre subterráneamente unos 20 metros por debajo del mismo. En estiaje, dos galerías permiten el enlace subterráneo de las cavidades situadas en ambas márgenes del río.
En el flanco sur del sinclinal se desarrolla una segunda axial, ajustada al actual curso subterráneo del río Guareña, en su camino hacia las resurgencias por las que verá de nuevo la luz, junto al resto de las aguas infiltradas en el Complejo.
Nos encontramos pues ante un karst modélico, en el que la tectónica y la litología han sentado las bases que han permitido la disolución y la evolución de una red de conductos de la que se conocen más de un centenar de kilómetros y aún permanece viva. No es frecuente poder contemplar como dos cursos de agua permanentes, más otro temporal, se convierten bruscamente en subterráneos, y que tras discurrir durante kilómetros por el subsuelo recibiendo el aporte de varios cursos más, en este caso totalmente hipógeos, resurgen de nuevo a la luz.
Un gran complejo subterráneo de las características de Ojo Guareña reúne prácticamente todas las morfologías endokársticas posibles. No obstante, intentaremos detallar las particularidades más relevantes de cada sector.
En el Dédalo Oeste ya hemos destacado, en primer lugar, el hecho de ser el más tridimensional de todos, debido a que se ubica en la prolongación hacia el sur del Ojo del Guareña. El Circo de San Bernabé se ve bordeado, casi sin solución de continuidad, por una sucesión de grandes salas excavadas a diferentes niveles: Sala del Algodón, Sala de la Ciudad Dormida, Sala Guipúzcoa, Sala Negra, Sala de las Huellas, Sala GEBU, Sala del Cacique, enlazadas entre sí por multitud de conductos. Por el nivel inferior discurre el curso subterráneo del río Guareña, sucediéndose en su lecho las cascadas, marmitas y toboganes que rápidamente le hacen ganar desnivel.
La Sima Dolencias es otro de los lugares notables en Ojo Guareña, presenta un desnivel de 65 metros, abriéndose en su bóveda dos entradas que la iluminan de forma natural. Por la más estrecha se precipita el arroyo de Villamartín, originando una cascada de 54 metros de altura que, en los inviernos muy rigurosos, llega a helarse. Durante los días próximos al solsticio de verano, un rayo de sol entra verticalmente por la misma, alcanzando el fondo de la sala. Es un lugar emblemático que se transforma con las diferentes estaciones.
El Museo de Cera, Altamirix, la Sala del Cacique, y la Ciudad Dormida son algunos de los lugares de mayor belleza de este sector, caracterizados por la profusión de espeleotemas.
La Cueva de Kaite, un antiguo sumidero, anterior a la formación del Circo de San Bernabé, sin comunicación con la red principal, es otra de las maravillas de Ojo Guareña. Desde su Portalón de entrada se divisa una incomparable vista del Valle de Sotoscueva y en sus salas profundas proliferan los espeleotemas o concreciones: estalactitas, estalagmitas, excéntricas, columnas, gours, le proporcionan una gran belleza que permanece resguardada debido a la importancia del arte rupestre existente en sus paredes.
El Sector Dulla se origina al Oeste del Circo de San Bernabé y guarda muchas similitudes con el Dédalo Oeste. En él se localiza la Sala Berta, el mayor volumen conocido en Ojo Guareña, un enorme conducto de sección triangular de más de 20 metros de altura por otros tantos de anchura y 300 metros de longitud. Entre los bloques que jalonan su piso, puede accederse hasta el Río de los Erizos, que discurre todavía 20 metros más abajo y debe su nombre a los fósiles del género micraster que se observan en sus paredes.
En los conductos altos de este sector, caracterizados por sus bellas formas de disolución, pueden observarse, al comienzo de la Galería de la Carta, frágiles estalactitas isotubulares (macarrones) de hasta 5 metros de longitud, así como puntas hexagonales de yeso de hasta 30 cm de longitud, al final de la Galería del Beso.
La Sima Rizuelos se caracteriza por ser el enlace entre la red principal y los conductos originados en el páramo de Villamartín, como consecuencia de la infiltración. Destaca el Río de las Marmitas, el principal de los cursos de agua hipógeos que se conocen en Ojo Guareña, siendo reseñable el hecho de que el enlace se produjo entre dos conductos por los que el agua circuló en sentido opuesto, según se observa claramente en las huellas de corriente existentes en sus paredes.
Al Sector Central se accede por la Dolina de Palomera, otro antiguo sumidero, probablemente anterior al encajamiento del Guareña en el Circo de San Bernabé, que entre una espesa vegetación permite el acceso cómodo hasta la Galería Principal del Complejo. Esta evoluciona en dirección W-E durante varios kilómetros y aunque se prolonga en los sectores inmediatos a éste, alcanza su mayor majestuosidad en el Sector Central, especialmente en el tramo conocido como Sala Edelweiss.
También es notable la belleza del Nuevo Paso, con una variada litogénesis, en la que destacan las estalactitas isotubulares y los gours. La Galería de los Sedimentos destaca por sus formas de disolución, principalmente "pendants" y huellas de corriente, así como por su pozo sifonable final, una verdadera ventana que permite estudiar cómodamente las oscilaciones del nivel freático.
El Sector Este-Huesos se inicia con Los Lagos, una sucesión de siete grandes gours, escalonados a diferentes alturas, que se prolongan durante 300 metros. En su extremo oriental se localizan las que se bautizaron como Galerías Turísticas, un conjunto de galerías de gran belleza, por su variada litogénesis, entre las que destacan la Galería Diputación, Sala de las Maravillas y Galería de la Esperanza, caracterizadas por sus grandes coladas, estalagmitas y columnas. Este sector cuenta con el acceso directo de la Sima de los Huesos, una vertical de 31 metros de desnivel que incide sobre la bóveda de una de las galerías.
Con este sector enlazan, en su nivel inferior, desde el NW, una red de conductos originada en el Río de la Galería Lancaster, de exploración bastante penosa, que se supone relacionado con alguna pérdida del río Guareña.
El eje principal continúa descendiendo lentamente hasta alcanzar el sifón terminal de la Galería de la Esperanza, que aún permanece sin explorar.
Covaneria es una de las cavidades de este sector sin comunicación actual con la red principal, aunque originalmente constituyó una de las resurgencias del Complejo. Su dolina de entrada, prácticamente oculta por la vegetación, es otro de los puntos de gran belleza pues, tras un doble arco natural, da acceso a una cómoda galería iluminada por la luz natural que entra por tres simas que se abren en su bóveda.
El Sector Este-Trema esta constituído por las cavidades que se abren en la margen derecha del Cañón del Trema. Los niveles superiores, son galerías que deben su origen al río Guareña, pero que fueron seccionadas por la incisión del Trema. Las huellas de corriente de los niveles inferiores indican su relación genética con los Sumideros del Río Trema, alguno de ellos de gran espectacularidad. Dos de sus galerías inferiores permiten cruzar subterráneamente el cañón, enlazando con las cavidades de la margen izquierda.
El Sector Oricedo está compuesto por las cavidades con acceso desde la margen izquierda del Trema, especialmente por Cueva La Mina, en cuyos niveles inferiores puede observarse el curso subterráneo del río Trema, mucho más sosegado que el impetuoso recorrido del Guareña. En una lateral se produce el enlace con las cavidades de la margen derecha.
El enrejado de Las Diaclasas, de más de 2 km, permanece sin conectar con la red principal de Ojo Guareña. Constituyen uno de los puntos de mayor interés geomorfológico y didáctico del Complejo.
La Segunda Axial es el sector localizado en el flanco sur del Sinclinal de La Mesa, incluyendo también los dos únicos conductos que permiten el enlace desde las galerías de la axial principal. Se inicia en la Sima de los Italianos que, tras un punto bajo sifonado casi permanentemente, nos conduce a la Galería de los Italianos, un bello conducto con secciones casi invariables durante centenares de metros, tapizado de huellas de corriente.
Más al sur, en la Galería del Hambre, se produce el cruce subterráneo del eje del sinclinal, punto bajo de fácil sifonamiento, lo que permite observar con nitidez, en las paredes de la galería, el cambio del buzamiento de los estratos en ambos flancos del sinclinal.
Tras la Sala Encarnación, la galería da un brusco giro, adaptando su dirección a la Falla de Villamartín, siendo conocida, a partir de aquí como Galería del Aburrimiento, un monótono colector que discurre, durante kilómetros, apenas unos metros por encima del nivel freático, con secciones uniformes durante centenares de metros, en las que apenas altera la monotonía un estrato plagado de fósiles de rudistas, familia de moluscos característica de los arrecifes del Cretácico superior, que puede observarse durante cientos de metros.
El sifón terminal de la Galería del Aburrimiento se localiza a más de 7 kilómetros de la entrada de Cueva Palomera. Apenas explorado en sus primeros cien metros, todavía debe prolongarse durante unos 1.200 metros hasta enlazar con las galerías localizadas en la resurgencia de La Torcona.
El Sector Resurgencia posee, en su totalidad, un enorme interés hidrogeológico, geomorfológico y didáctico, al encauzar en una serie de resurgencias localizadas a lo largo de una misma falla, los diferentes puntos por los que emergen las aguas de todos los ríos del Complejo.
La Torcona, con sus 2.500 metros topografiados, es la más elevada y principal de todas las resurgencias, aunque solamente funciona en época invernal, drenando caudales de varios metros cúbicos por segundo.
El Torcón es otra de las principales resurgencias, con cerca de 500 metros explorados hasta la fecha, sumergidos en su totalidad, que funciona permanentemente durante casi todo el año, excepto en los momentos de máximo estiaje.
En el Conjunto Surgente del km 8 de la carretera de Villarcayo a Quintanilla del Rebollar, en el subálveo del Trema, es donde se produce la descarga permanente del acuífero de Ojo Guareña, hecho que propició la instalación de un pequeño azud.
En el Sector Bedón destaca la Cueva de las Yeguas, con casi 2 km de desarrollo, aunque no tiene relación hidrológica con el Complejo Kárstico de Ojo Guareña, al encargarse del drenaje de parte del páramo de Bedón.
Dentro del karst de Ojo Guareña, pero fuera del área declarada como Monumento Natural, se localiza, en término de Puentedey, la Cueva del Paño, una de las más bellas de Ojo Guareña, con 1,5 km de desarrollo. Igualmente debe mencionarse el puente natural de Puentedey de 75 metros de longitud y 34 de anchura, con 15 metros de altura media, sobre el que se alza el bello pueblo al que ha dado nombre.
A poca distancia, en Quintanilla de Valdebodres, se localiza el Pozo del Infierno, importante surgencia de la que se abastece la localidad, de la que se han explorado varios centenares de metros, la mayoría de ellos sifonados.

5. Arqueología


La importancia arqueológica del karst de Ojo Guareña, declarado Monumento Histórico Artístico desde 1970, viene dada por el completo registro del complejo, que presenta una secuencia cultural que va desde el Paleolítico Medio a la Edad Media, en donde predominan las culturas de la Prehistoria reciente.
La importancia arqueológica del karst de Ojo Guareña, declarado Monumento Histórico Artístico desde 1970, viene dada por el completo registro del complejo, que presenta una secuencia cultural que va desde el Paleolítico Medio a la Edad Media, en donde predominan las culturas de la Prehistoria reciente.
El yacimiento más antiguo se localiza en la Cueva de Prado Vargas, donde se localizan restos Ursus spelaeus, así como industria musteriense, con una cronología de hace unos 70.000 años que corresponde al Homo neandertalensis..
El yacimiento más antiguo se localiza en la Cueva de Prado Vargas, donde se localizan restos Ursus spelaeus, así como industria musteriense, con una cronología de hace unos 70.000 años que corresponde al Homo neandertalensis..
Entre la gran variedad de evidencias detectadas se encuentran zonas de hábitat, localizadas en los portalones de las cuevas como Kaite, Cubía o Palomera, ésta con un amplio registro estratigráfico de la Edad del Bronce, que alcanza una cota de 4,70 m de profundidad.
Algunos hallazgos se localizan a distancias superiores al kilómetro desde sus respectivas entradas, observándose una especial predilección por galerías elevadas, a menudo de difícil acceso. En algunos casos se trata de evidencias de antiguas incursiones en la cavidad: Galerías y Sala de las Huellas, Vía Seca; en otros de inhumaciones en lugares recónditos: Balcón de la Galería Principal, Kaite II, Covaneria, Cubía, Cueva del Oro, Cueva de las Llanas III, existiendo también hallazgos de difícil adscripción, como el del Nuevo Paso.
Entre la gran variedad de evidencias detectadas se encuentran zonas de hábitat, localizadas en los portalones de las cuevas como Kaite, Cubía o Palomera, ésta con un amplio registro estratigráfico de la Edad del Bronce, que alcanza una cota de 4,70 m de profundidad.Algunos hallazgos se localizan a distancias superiores al kilómetro desde sus respectivas entradas, observándose una especial predilección por galerías elevadas, a menudo de difícil acceso. En algunos casos se trata de evidencias de antiguas incursiones en la cavidad: Galerías y Sala de las Huellas, Vía Seca; en otros de inhumaciones en lugares recónditos: Balcón de la Galería Principal, Kaite II, Covaneria, Cubía, Cueva del Oro, Cueva de las Llanas III, existiendo también hallazgos de difícil adscripción, como el del Nuevo Paso.
Destacan especialmente las estaciones de arte rupestre: Sala de las Pinturas, Sala Cartón, Sala de la Fuente, Sala Keimada, Galería del Chipichondo, Galería de los Grabados, Galería Macarroni y Gran Diagonal, todas ellas en Cueva Palomera, así como en la Cueva de Kaite, Cubía, Cueva la Mina y Cueva de San Bernabé. No incluimos entre éstas a aquellos otros lugares que tan sólo presentan marcas de tizonazos, otros siete yacimientos de Cueva Palomera.
Destacan especialmente las estaciones de arte rupestre: Sala de las Pinturas, Sala Cartón, Sala de la Fuente, Sala Keimada, Galería del Chipichondo, Galería de los Grabados, Galería Macarroni y Gran Diagonal, todas ellas en Cueva Palomera, así como en la Cueva de Kaite, Cubía, Cueva la Mina y Cueva de San Bernabé. No incluimos entre éstas a aquellos otros lugares que tan sólo presentan marcas de tizonazos, otros siete yacimientos de Cueva Palomera.
Esta región que se caracteriza por las poblaciones de cavernas, presenta marginalmente la presencia del fenómeno megalítico en el dolmen, destruido en 1957, del término del Murucal de la Serna de Villamartín de Sotoscueva, que proporcionó restos humanos, industria microlítica y cuentas de collar.
Esta región que se caracteriza por las poblaciones de cavernas, presenta marginalmente la presencia del fenómeno megalítico en el dolmen, destruido en 1957, del término del Murucal de la Serna de Villamartín de Sotoscueva, que proporcionó restos humanos, industria microlítica y cuentas de collar.
También se han localizado abundantes e importantes restos metalúrgicos, de entre los que destaca el hallazgo de un hacha arcaica en las Galerías Altas de Palomera, un punzón de bronce de tipo "brújula" de finales del Bronce Inicial, localizado en la Galería del Nuevo Paso, y el depósito "escondido" de hachas con talón y anillas, correspondiente al Bronce Final, procedente de la cuesta del Pico Cuerno, situado en la margen derecha del valle del Guareña.
También se han localizado abundantes e importantes restos metalúrgicos, de entre los que destaca el hallazgo de un hacha arcaica en las Galerías Altas de Palomera, un punzón de bronce de tipo "brújula" de finales del Bronce Inicial, localizado en la Galería del Nuevo Paso, y el depósito "escondido" de hachas con talón y anillas, correspondiente al Bronce Final, procedente de la cuesta del Pico Cuerno, situado en la margen derecha del valle del Guareña.
De la Edad del Hierro se registran dos posibles castros, uno en el alto de La Mesa, entre Cornejo y Villamartín de Sotoscueva y el otro en el Poblado del Montecillo, en Peña Dulla, término de Quintanilla de Valdebodres.
De la Edad del Hierro se registran dos posibles castros, uno en el alto de La Mesa, entre Cornejo y Villamartín de Sotoscueva y el otro en el Poblado del Montecillo, en Peña Dulla, término de Quintanilla de Valdebodres.
La romanización trajo consigo una importante red viaria, documentando en el Valle de Sotoscueva el paso de la vía romana Flaviobriga-Pisoraca (Bilbao-Herrera de Pisuerga). En época bajoimperial se detecta una reocupación de los hábitats en cuevas, en donde se han recuperado restos de producciones cerámicas de Terra Sigillata Hispánica Tardía, principalmente en los portalones de Kaite y la Cueva de Gayangos.
La romanización trajo consigo una importante red viaria, documentando en el Valle de Sotoscueva el paso de la vía romana Flaviobriga-Pisoraca (Bilbao-Herrera de Pisuerga). En época bajoimperial se detecta una reocupación de los hábitats en cuevas, en donde se han recuperado restos de producciones cerámicas de Terra Sigillata Hispánica Tardía, principalmente en los portalones de Kaite y la Cueva de Gayangos.
De época Altomedieval data la consolidación de los núcleos de población reagrupándolos en Merindades. En algunos casos quedan muestras de ocupación en las entradas de las cuevas, entre las que destaca el Grupo de San Bernabé de Cueva de Sotoscueva. De estos hábitats hemos recuperado numerosos fragmentos de cerámicas pintadas de repoblación y se han detectados numerosos silos excavados en la arcilla de las galerías subterráneas, resaltando la Cueva del Moro, la inferior a ésta, y el conjunto de la Ermita de San Tirso y San Bernabé, estando todas ellas interrelacionadas y agrupadas en un mismo contexto.
De época Altomedieval data la consolidación de los núcleos de población reagrupándolos en Merindades. En algunos casos quedan muestras de ocupación en las entradas de las cuevas, entre las que destaca el Grupo de San Bernabé de Cueva de Sotoscueva. De estos hábitats hemos recuperado numerosos fragmentos de cerámicas pintadas de repoblación y se han detectados numerosos silos excavados en la arcilla de las galerías subterráneas, resaltando la Cueva del Moro, la inferior a ésta, y el conjunto de la Ermita de San Tirso y San Bernabé, estando todas ellas interrelacionadas y agrupadas en un mismo contexto.


5.1. Galerías y Sala de las Huellas


Uno de los hallazgos más singulares de Ojo Guareña lo constituyen las improntas de pies descalzos de las Galerías y Sala de las Huellas, que muestran un recorrido de ida y vuelta de unos 400 m, único en España y excepcional en Europa. Estas galerías situadas en los niveles altos del complejo, a las que actualmente se accede desde Cueva Palomera, contaron con un acceso desde la Cueva de San Bernabé, o en sus inmediaciones. La datación de un fragmento de madera carbonizada existente en una galería próxima proporcionó una datación por C-14 de 15.600 ± 230 B.P. En la actualidad, nuevas dataciones están a la espera de un estudio definitivo.


5.2. Sala Cartón y Sala de las Pinturas

Entre los santuarios de arte rupestre de Ojo Guareña destaca la Sala de las Pinturas, situada a unos 300 m de la entrada de Cueva Palomera, datada en torno a 11.000 años B.P. El conjunto de pinturas se localiza en el ábside de la sala y está compuesto por 50 triángulos, 38 de ellos rellenos con tinta plana; 28 representaciones zoomorfas (11 completas) correspondientes a cuatro cérvidos, tres équidos, ocho cápridos, cuatro bóvidos, un proboscídeo, un posible carnívoro y 6 antropomorfos, de los que destacan dos figuras rayadas y una pequeña representación esquemática con cabeza triangular. El conjunto se completa con numerosos trazos aislados y abundantes grabados, que aparecen también en las pequeñas laterales existentes. A priori, no descartamos la existencia de arte paleolítico en algún otro santuario del complejo.
Entre los santuarios de arte rupestre de Ojo Guareña destaca la Sala de las Pinturas, situada a unos 300 m de la entrada de Cueva Palomera, datada en torno a 11.000 años B.P. El conjunto de pinturas se localiza en el ábside de la sala y está compuesto por 50 triángulos, 38 de ellos rellenos con tinta plana; 28 representaciones zoomorfas (11 completas) correspondientes a cuatro cérvidos, tres équidos, ocho cápridos, cuatro bóvidos, un proboscídeo, un posible carnívoro y 6 antropomorfos, de los que destacan dos figuras rayadas y una pequeña representación esquemática con cabeza triangular. El conjunto se completa con numerosos trazos aislados y abundantes grabados, que aparecen también en las pequeñas laterales existentes. A priori, no descartamos la existencia de arte paleolítico en algún otro santuario del complejo.
Se conoce como Sala Cartón a la antesala de la Sala de las Pinturas, en sus paredes se localizan innumerables grabados del tipo “macarroni”, así como otros realizados con palos, restos de tizonazos y pisadas humanas y restos de antorchas en una galería elevada.
Se conoce como Sala Cartón a la antesala de la Sala de las Pinturas, en sus paredes se localizan innumerables grabados del tipo “macarroni”, así como otros realizados con palos, restos de tizonazos y pisadas humanas y restos de antorchas en una galería elevada.


5.3. Sala de la Fuente


En la Sala de la Fuente, galería superior situada a 360 m al E de Cueva Palomera, se localiza otra importante estación de arte rupestre. Esta sala está compuesta por el sector inferior, en donde se observa una concentración de grabados de trazo fino e inciso, entre los que predominan los zigzags y el sector superior que se corresponde con un importante santuario de arte postpaleolítico, en proceso de estudio en la actualidad, que cuenta con dos dataciones calibradas de C-14 en torno a 4.300 B.P. y una tercera en torno a 5.600 B.P.
En la Sala de la Fuente, galería superior situada a 360 m al E de Cueva Palomera, se localiza otra importante estación de arte rupestre. Esta sala está compuesta por el sector inferior, en donde se observa una concentración de grabados de trazo fino e inciso, entre los que predominan los zigzags y el sector superior que se corresponde con un importante santuario de arte postpaleolítico, en proceso de estudio en la actualidad, que cuenta con dos dataciones calibradas de C-14 en torno a 4.300 B.P. y una tercera en torno a 5.600 B.P.
Se observa una distribución espacial por temas, apareciendo en el primer tercio una gran concentración de tizonazos. El segundo tercio se caracteriza por grabados de trazo fino y representaciones figuradas esquemáticas asociadas, con una posible escena de caza, panel con antropomorfo que sujeta por la cola a un ciervo de gran cornamenta y cuerpo raspado similar a los de Kaite II, junto a zigzags, círculos inscritos, líneas paralelas o trazos aislados. El último tercio se caracteriza por la gran profusión de grabados, en donde predomina un complejo zigzag, dispuesto en el centro de la bóveda, delimitado por otros zigzags, emparrillados, trazos aislados, un posible "ídolo" y una figura antropomorfa con zigzag similar a los antropomorfos de la Sala de las Pinturas. Al final de la galería aparecen elementos aislados entre los que destacan una "cabaña" o "vulva", con trazos interiores, y la cabeza de un gran ciervo aprovechando el relieve natural de la roca y marcando los candiles de las astas a través de trazos discontinuos. El suelo de la galería presenta un aterrazamiento artificial y varios silos localizados en los bordes, característica común en los santuarios con arte rupestre del Complejo.

5.4. Sala Keimada y Galería del Chipichondo


La Sala Keimada, situada al N de la Sala Edelweiss, a 300 m de la entrada de Palomera, presenta un gran panel con grabados tipo “macarroni" en el techo del laminador de acceso, y un panel principal con pinturas, compuesto por dos triángulos contorneados en negro y dos manchas planas, junto a grabados incisos y tizonazos aislados. Al final de la sala se observan grabados digitales formando retículas y tizonazos aislados. En el suelo aparecen improntas de dedos, posiblemente humanos, y de pezuñas, junto a numerosos carbones.
La Galería del Chipichondo es una lateral ascendente situada en un nivel superior a la Rampa de Palomera, que contiene muestras de arte rupestre con varios paneles de grabados, la única pintura roja del complejo y un relieve zoomorfo. Los grabados se caracterizan por finos trazos incisos y de tipo "macarroni" que representan zigzags, retículas, retiformes y líneas paralelas. La pintura roja está formada por una mancha amorfa existente en el último tercio de la galería, próxima al relieve. Éste representa una gran figura zoomorfa, posiblemente un toro-bisonte, de 180 cm de longitud por 90 cm de altura, con incisiones a modo de hueco grabado con formas de hachas de talón.

5.5. Galería de los Grabados y Galería Macarroni


La Galería de los Grabados se encuentra en el nivel superior de la Sima Dolencias y se caracteriza por ser un conducto serpenteante, cómodo y seco. Los grabados rupestres se localizan en el interior de la galería, en donde no aparecen vestigios materiales. Se caracterizan por estar incisos con instrumentos finos o romos o hechos con los dedos tipo "macarroni". Los temas representados son las retículas, líneas paralelas, arboriformes, "cabañas" y trazos aislados, mientras que existen dudas sobre la cronología de una figura zoomorfa. Al final de la galería se documenta una retícula pintada en negro.
La Galería Macarroni se localiza a 150 m al W de la Sima Dolencias, en un nivel superior a la Galería del Teléfono. Se trata de una galería ascendente con el suelo concrecionado y un gran conducto de techo. Los grabados están delimitados por tizonazos y son de tipo "macarroni", los temas representados son líneas, círculos concéntricos, serpentiformes, espirales y largos zigzags, junto a tizonazos aislados.

5.6. Vía Seca


La Vía Seca es una zona laberíntica que se desarrolla en un nivel superior a la Galería Principal, a unos 500 m de la entrada. En esta zona apareció el esqueleto de un individuo de la Edad del Hierro que se perdió en la cueva. Junto a sus restos óseos apareció una fíbula de bronce, el broche del cinturón, también de bronce, y la cinta de cuero del mismo, cuyas tipologías se enmarcan cronológicamente a mediados del siglo VI a. C. También se conserva una represa artificial, hecha con barro y fragmentos de estalactitas rotas, que construyó para embalsar el agua que rezumaba de unas estalactitas.

5.7. Cueva de San Tirso y San Bernabé


El conjunto de la Ermita de San Tirso y San Bernabé destaca como punto de referencia de una actividad artística popular, sin grandes ambiciones pero de especial interés. La ermita es semi-rupestre con una nave y altar. Los elementos más antiguos se corresponderían con la bóveda de cañón apuntada de la cabecera, posiblemente del siglo XIII. En el interior de la ermita aparece representado el martirio de San Tirso, así como varios de los milagros de los santos, que muestran un interesante arte popular de los siglos XVIII y XIX.
El conjunto de la Ermita de San Tirso y San Bernabé destaca como punto de referencia de una actividad artística popular, sin grandes ambiciones pero de especial interés. La ermita es semi-rupestre con una nave y altar. Los elementos más antiguos se corresponderían con la bóveda de cañón apuntada de la cabecera, posiblemente del siglo XIII. En el interior de la ermita aparece representado el martirio de San Tirso, así como varios de los milagros de los santos, que muestran un interesante arte popular de los siglos XVIII y XIX.
Mención especial merece el enterramiento situado en el exterior de la Ermita de San Tirso y San Bernabé. El cuerpo se localiza, semidescubierto, en una grieta de la roca caliza, con lajas de cubierta, que posiblemente se corresponda con algún eremita. Del interior se recuperaron varias inhumaciones que se encuentran actualmente depositadas en uno de los silos. Estos elementos hablan de un importante foco eremítico.
Mención especial merece el enterramiento situado en el exterior de la Ermita de San Tirso y San Bernabé. El cuerpo se localiza, semidescubierto, en una grieta de la roca caliza, con lajas de cubierta, que posiblemente se corresponda con algún eremita. Del interior se recuperaron varias inhumaciones que se encuentran actualmente depositadas en uno de los silos. Estos elementos hablan de un importante foco eremítico.
En el interior, en la Galería de los Silos, también se observan evidencias de arte rupestre postpaleolítico. En varios puntos se han localizado restos humanos, probablemente todos ellos de época medieval.
En el interior, en la Galería de los Silos, también se observan evidencias de arte rupestre postpaleolítico. En varios puntos se han localizado restos humanos, probablemente todos ellos de época medieval.
La otra entrada de San Bernabé da acceso a la Sala del Concejo, en la que se reunían los miembros del ayuntamiento de la merindad, cuya construcción data de 1885, aunque las reuniones se han constatado desde 1616, anteriormente se reunían en torno a una encina situada en el Alto Concha. En 1924 el ayuntamiento se trasladó a Cornejo de Sotoscueva. En esta cavidad también estaba ubicada la cárcel de la merindad.
La otra entrada de San Bernabé da acceso a la Sala del Concejo, en la que se reunían los miembros del ayuntamiento de la merindad, cuya construcción data de 1885, aunque las reuniones se han constatado desde 1616, anteriormente se reunían en torno a una encina situada en el Alto Concha. En 1924 el ayuntamiento se trasladó a Cornejo de Sotoscueva. En esta cavidad también estaba ubicada la cárcel de la merindad.


5.8. Cueva de Kaite


Presenta un amplio Portalón, separado del resto de la cavidad por un muro prehistórico, hoy concrecionado. En un sector intermedio de la cavidad, tras un nuevo estrechamiento, se localizaba el sector de inhumaciones y en la zona profunda las evidencias de arte rupestre.
Presenta un amplio Portalón, separado del resto de la cavidad por un muro prehistórico, hoy concrecionado. En un sector intermedio de la cavidad, tras un nuevo estrechamiento, se localizaba el sector de inhumaciones y en la zona profunda las evidencias de arte rupestre.
El santuario de Kaite II, constituye una de las estaciones de arte rupestre más significativas, sin paralelos estilísticos conocidos. Muestra una evolución artística que va desde el naturalismo, representado en la cierva con cría, hasta el esquematismo de las representaciones zoomorfas, definido por los elementos rectos relacionados con el arte Eneolítico de la Cultura Dolménica.
El santuario de Kaite II, constituye una de las estaciones de arte rupestre más significativas, sin paralelos estilísticos conocidos. Muestra una evolución artística que va desde el naturalismo, representado en la cierva con cría, hasta el esquematismo de las representaciones zoomorfas, definido por los elementos rectos relacionados con el arte Eneolítico de la Cultura Dolménica.
Presenta 21 paneles de grabados con tres técnicas diferentes: una con trazos digitales tipo "macarroni" para elementos envolventes y signos abstractos, otra de trazos finos e incisos de las figuras zoomorfas y el raspado de las figuras esquemáticas, con paralelos con los ciervos de la Sala de la Fuente. Representan a figuras zoomorfas exclusivamente de cápridos y cérvidos que miran a la izquierda y tienen un alargamiento de las extremidades y cuello. Son figuras estáticas, asociadas entre sí o con signos, algunos envolventes, formando posibles escenas de fecundidad. También hay un panel de pinturas con representaciones esquemáticas de una figura antropomorfa junto a un zoomorfo, formando una posible escena de caza o domesticación.
Presenta 21 paneles de grabados con tres técnicas diferentes: una con trazos digitales tipo "macarroni" para elementos envolventes y signos abstractos, otra de trazos finos e incisos de las figuras zoomorfas y el raspado de las figuras esquemáticas, con paralelos con los ciervos de la Sala de la Fuente. Representan a figuras zoomorfas exclusivamente de cápridos y cérvidos que miran a la izquierda y tienen un alargamiento de las extremidades y cuello. Son figuras estáticas, asociadas entre sí o con signos, algunos envolventes, formando posibles escenas de fecundidad. También hay un panel de pinturas con representaciones esquemáticas de una figura antropomorfa junto a un zoomorfo, formando una posible escena de caza o domesticación.


5.9. Cubía


Su galería de acceso también constituyó un importante hábitat durante la prehistoria. Tras un estrechamiento, presenta en su interior cinco grupos de paneles de grabados. Estos son principalmente de tipo "macarroni", hechos con los dedos y palos sobre la arcilla blanda, e incisiones finas. Predominan los temas lineales multidireccionales (a los que se superponen "graffitis" modernos), zigzags, trazos paralelos serpentiformes, curvas y multitud de líneas paralelas, así como retículas, círculos y "cabañas". Al final de la cavidad, en una galería inferior, existen finos grabados incisos, que representan un gran zigzag, "cabañas", círculos, trazos aislados y un posible antropomorfo femenino.
Su galería de acceso también constituyó un importante hábitat durante la prehistoria. Tras un estrechamiento, presenta en su interior cinco grupos de paneles de grabados. Estos son principalmente de tipo "macarroni", hechos con los dedos y palos sobre la arcilla blanda, e incisiones finas. Predominan los temas lineales multidireccionales (a los que se superponen "graffitis" modernos), zigzags, trazos paralelos serpentiformes, curvas y multitud de líneas paralelas, así como retículas, círculos y "cabañas". Al final de la cavidad, en una galería inferior, existen finos grabados incisos, que representan un gran zigzag, "cabañas", círculos, trazos aislados y un posible antropomorfo femenino.


6. Biología


Las investigaciones preliminares realizadas en el Complejo detectaron la existencia de una variada diversidad biológica, propia de una cavidad con elevado aporte energético debido a sus variados cursos de agua. Fruto de ellas fue la descripción de 63 especies de invertebrados terrestres y otras 10 acuáticas, citándose diversas especies y subespecies como nuevas para la ciencia. No obstante en la investigación bioespeleológica queda casi todo por hacer. En los últimos años Ana I. Camacho, bióloga del M.N.C.N. de Madrid ha coordinado las investigaciones en el Complejo citando, en 1998, la presencia de, al menos, 81 especies faunísticas, distribuidas entre 15 géneros distintos.
Las investigaciones preliminares realizadas en el Complejo detectaron la existencia de una variada diversidad biológica, propia de una cavidad con elevado aporte energético debido a sus variados cursos de agua. Fruto de ellas fue la descripción de 63 especies de invertebrados terrestres y otras 10 acuáticas, citándose diversas especies y subespecies como nuevas para la ciencia. No obstante en la investigación bioespeleológica queda casi todo por hacer. En los últimos años Ana I. Camacho, bióloga del M.N.C.N. de Madrid ha coordinado las investigaciones en el Complejo citando, en 1998, la presencia de, al menos, 81 especies faunísticas, distribuidas entre 15 géneros distintos.
En 2002 se ha iniciado un estudio biológico del Complejo, gracias a un convenio de colaboración firmado entre la Junta de Castilla y León y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, lo que ya ha permitido incrementar el número de especies endémicas de Ojo Guareña en otras dos más.
En 2002 se ha iniciado un estudio biológico del Complejo, gracias a un convenio de colaboración firmado entre la Junta de Castilla y León y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, lo que ya ha permitido incrementar el número de especies endémicas de Ojo Guareña en otras dos más.
La valoración de la vegetación y de la fauna existente en el exterior del Espacio Natural de Ojo Guareña viene recogida en el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales realizado en 1994, registrándose, tanto en la vegetación como en la fauna, varios endemismos regionales.
La valoración de la vegetación y de la fauna existente en el exterior del Espacio Natural de Ojo Guareña viene recogida en el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales realizado en 1994, registrándose, tanto en la vegetación como en la fauna, varios endemismos regionales.


7. Etnografía


La región es rica en creencias y leyendas. Entre las relacionadas con el karst destacan las que hacen referencia a su relación con los moros (6), a la existencia de tesoros ocultos en ellas (3), a su gran longitud o comunicación con otras cavidades (5) y al destino de las aguas que se ocultan en su interior (3). En el exterior destacan las relacionadas con la existencia de brujas en la zona, de las que conocemos 7 leyendas, más otra que las relaciona con el interior de las cavidades.
La región es rica en creencias y leyendas. Entre las relacionadas con el karst destacan las que hacen referencia a su relación con los moros (6), a la existencia de tesoros ocultos en ellas (3), a su gran longitud o comunicación con otras cavidades (5) y al destino de las aguas que se ocultan en su interior (3). En el exterior destacan las relacionadas con la existencia de brujas en la zona, de las que conocemos 7 leyendas, más otra que las relaciona con el interior de las cavidades.
Si bien conocemos leyendas relacionadas con 15 cavidades diferentes, la mayoría se concentran en torno a la Cueva de San Bernabé, donde hacen referencia a 8 temas diferentes, lo que nos da una idea de su protagonismo en la comarca.
Si bien conocemos leyendas relacionadas con 15 cavidades diferentes, la mayoría se concentran en torno a la Cueva de San Bernabé, donde hacen referencia a 8 temas diferentes, lo que nos da una idea de su protagonismo en la comarca.


8. Otras cavidades declaradas Patrimonio de la Humanidad


Dentro de la lista de lugares que forman parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO figuran algunas cavidades por sus aspectos culturales, bien sea por sus estaciones de arte rupestre, como son los casos de los numerosos abrigos con arte levantino del Mediterraneo español, o las cavidades con arte paleolítico de la Dordoña francesa, o bien por la importancia de sus yacimientos antropológicos como es el caso de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca.
Dentro de la lista de lugares que forman parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO figuran algunas cavidades por sus aspectos culturales, bien sea por sus estaciones de arte rupestre, como son los casos de los numerosos abrigos con arte levantino del Mediterraneo español, o las cavidades con arte paleolítico de la Dordoña francesa, o bien por la importancia de sus yacimientos antropológicos como es el caso de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca.
No obstante, dentro de la lista también existen cinco complejos de cavidades por sus valores naturales, siendo estos los siguientes:

8.1. Parque Nacional Mammoth Cave (U.S.A.)


Era Parque Nacional desde 1941 y genera un flujo de unos 500.000 visitantes al año. Declarado Patrimonio de la Humanidad en 1981, ocupa 20.541 Has. Alberga el mayor complejo de cavidades del mundo, con más de 540 kilómetros topografiados. Posee referencias históricas de primeras exploraciones realizadas a finales del siglo XVIII.
Era Parque Nacional desde 1941 y genera un flujo de unos 500.000 visitantes al año. Declarado Patrimonio de la Humanidad en 1981, ocupa 20.541 Has. Alberga el mayor complejo de cavidades del mundo, con más de 540 kilómetros topografiados. Posee referencias históricas de primeras exploraciones realizadas a finales del siglo XVIII.
Entre sus singularidades se incluyen la existencia de dos ríos subterráneos, una gran diversidad de mineralizaciones enriquecidas con sulfatos, así como sales de yeso.
También se han descrito tres especies de peces ciegos endémicas, así como 200 especies de invertebrados, cuatro de ellas endémicas.
Se cita la existencia de 50 yacimientos precolombinos de 4 épocas distintas.

8.2. Grutas de Skocjan (Eslovenia)


Declaradas Patrimonio de la Humanidad en 1986, ocupan una extensión mayor de 200 Has. Se localizan en la región de Kras (Karst en alemán) que, por extensión, se utiliza para denominar a todas las regiones con características similares en el mundo.
Constan de cuatro profundas dolinas hundidas (Sokolak, Globacak, Sapen Dol y Licicina), por las que circula un río subterráneo de 2,5 km, con desniveles de 148 m y anchuras de 100 metros. La longitud total del sistema es de 5 km y su profundidad de 230 m. También se incluye la Gruta de Mahorhic por sus lagos y cascadas.
Se trata del inicio de un vasto sistema subterráneo que finalmente emerge en las fuentes de Timavo (Golfo de Trieste).
Se hace mención a la existencia de especies botánicas endémicas, así como de la existencia del Proteus anginus una salamandra cavernícola, endémica de la zona.
En las proximidades existen 30 yacimientos arqueológicos con cronologías que alcanzan los 10.000 años de antigüedad.

8.3. Parque Nacional de las Grutas de Carlsbad (USA)


Declarado Patrimonio de la Humanidad en 1995, incluye 18.296 Has. Forman parte de la declaración 81 cavernas localizadas en el desierto de Chihuahua, originadas por la disolución de ácido sulfúrico sobre calizas arrecifales.
Declarado Patrimonio de la Humanidad en 1995, incluye 18.296 Has. Forman parte de la declaración 81 cavernas localizadas en el desierto de Chihuahua, originadas por la disolución de ácido sulfúrico sobre calizas arrecifales.
La mayor de todas ellas es la Caverna de Carlsbad, con amplias salas y formaciones minerales, habilitada parcialmente para el turismo.
Algunas son famosas por albergar una enorme colonia de más de un millón de murciélagos de la especie tadarida.
Otra caverna famosa, de reciente descubrimiento, es la conocida como Lechuguilla, cuyos accesos están absolutamente restringidos para fines científicos. Posee más de 100 km de desarrollo y bellísimas formaciones, algunas de ellas de gran rareza y espectacularidad.
En el conjunto del Parque Nacional, en el exterior, se cita la existencia de 64 especies de mamíferos, 331 de aves y 44 de anfibios y reptiles, así como unas 800 especies botánicas, algunas amenazadas.

8.4. Grutas de Aggtelek y del karst eslovaco (Hungría/Eslovaquia)


En 1985 se declararon Parque Nacional y en 1995 Patrimonio de la Humanidad, ocupando una extensión de 55.800 Has.
Alberga un conjunto de 712 grutas de las que la mayor es la Red de Baradla-Domica, de 21 kilómetros de desarrollo que se desarrolla entre ambos países, estando parcialmente habilitada al turismo.
Se cita la presencia de un paisaje kárstico con dolinas de más de 100 m de diámetro y la existencia de un río subterráneo. Igualmente se destaca la presencia de una gran estalagmita de casi 33 m de altura y de una estalactita de 13 m. Se describe una importante presencia de espeleotemas, así como de 500 especies de animales trogloditas, algunas de ellas endémicas, de las que 21 son especies de murciélagos.
Se habla de la existencia de restos de culturas prehistóricas que se remontan a 35.000 años de antigüedad.


8.5. Parque Nacional del Río Subterráneo de Puerto Princesa (Filipinas)


Declarado Patrimonio de la Humanidad en 1995, alberga una extensión de 38.753 Has. Se cita como elemento fundamental la existencia de un río subterráneo de 8,2 km de longitud que acaba desembocando en el mar, con salas de 120 metros de anchura y 60 de altura. La declaración incluye todos los afluentes del río, numerosos bosques de llanura y kársticos, así como el bosque húmedo de Palawan, uno de los más ricos de Asia, con abundantes endemismos botánicos, así como algunos mamíferos endémicos.
Declarado Patrimonio de la Humanidad en 1995, alberga una extensión de 38.753 Has. Se cita como elemento fundamental la existencia de un río subterráneo de 8,2 km de longitud que acaba desembocando en el mar, con salas de 120 metros de anchura y 60 de altura. La declaración incluye todos los afluentes del río, numerosos bosques de llanura y kársticos, así como el bosque húmedo de Palawan, uno de los más ricos de Asia, con abundantes endemismos botánicos, así como algunos mamíferos endémicos.
La fauna subterránea está poco estudiada aunque también se cita la presencia de endemismos.

9. Bibliografía básica


GRUPO ESPELEOLÓGICO EDELWEISS (1986): Monografía sobre Ojo Guareña, Kaite, Estudios de Espeleología Burgalesa, nº 4-5, 415 pp más Atlas Cartográfico. Edita Excma. Diputación Provincial de Burgos.
GRUPO ESPELEOLÓGICO EDELWEISS (1986): Monografía sobre Ojo Guareña, Kaite, Estudios de Espeleología Burgalesa, nº 4-5, 415 pp más Atlas Cartográfico. Edita Excma. Diputación Provincial de Burgos.
UNESCO (1999): Patrimonio de la Humanidad, Tomos 1, 3 y 7. Editan UNESCO, Planeta De Agostini y Ediciones San Marcos.

Burgos, 10 de marzo de 2003.

GRUPO ESPELEOLÓGICO EDELWEISS